La propia idea o concepto de leer latín puede significar cosas distintas para distinta gente. Una forma frecuente de expresarlo es algo así como igual que leo el periódico en español. Realmente, partimos de una mala comparación, como iremos entendiendo.

Intentemos, ya desde el principio de esta guía de lectura, responder a la pregunta… 👇
¿Se puede realmente leer latín con fluidez?
Por supuesto, depende de qué latín. Lo normal cuando pensamos en latín es que pensemos en Julio César, los discursos de Cicerón, la historiografía de Salustio, Tito Livio o Tácito, y por supuesto en la poesía de Virgilio, Ovidio y Catulo, entre muchísimos otros.

Entonces, volviendo a la comparación… la pregunta será: ¿podré leer a César, Cicerón, Virgilio y compañía como si estuviera leyendo un periódico español?
Se entenderá el mal planteamiento y formulación de la pregunta inicial cuando la cambiemos por esta otra: ¿puede un niño hispanohablante —que domina bastante su propia lengua y sabe leerla y entender lo que lee— leer a Góngora, a sor Juana Inés, a Quevedo, el Cid, a Cervantes, a Ortega y Gasset?
Con esto quiero decir que uno no lee estos textos en español igual que lee el periódico, porque el contenido y el estilo son sumamente diversos y requieren un esfuerzo cognitivo muy diferente.
¿Puede un hispanohablante llegar a entender a todos estos autores? Sí, desde luego. Sin embargo, no cuando apenas ha soltado el Micho, sino después de haber leído decenas de cuentos infantiles, para adolescentes, novelas adultas más sencillas, etc. Hacen falta cientos, si no miles, de horas de lectura.
Esta diferencia, este salto de nivel, está necesariamente mucho más acentuado en latín, una lengua en la que no somos nativos, a la que no tenemos exposición constante, y que es morfosintácticamente más compleja que el español.
Guía de lectura graduada
Tras este importantísimo preámbulo, deberíamos llegar a la conclusión de que alcanzar una razonable fluidez en la lectura de textos latinos requiere de muchas horas de exposición a textos latinos. (Muchas no son 10, sino más bien empezando a partir de 1000: el proceso, que es lo que es, dura años, realmente ad infinitum, aunque empieza a dar frutos muy satisfactorios a partir del segundo).

De la misma forma que los niños no empiezan a leer con el Quijote, no es verosímil que nosotros queramos empezar a leer con Cicerón o Virgilio. Sí podemos usar frases escogidas de sus textos para diseccionarlas y estudiar rasgos gramaticales, pero eso es distinto a la lectura.
Para practicar la lectura hay que leer. Dicho de otro modo: a leer se aprende leyendo. Por tanto, hemos de acostumbrarnos a leer lo máximo posible lo antes posible.
Y no podemos empezar con las Metamorfosis o las Catilinarias. Tenemos que empezar con los equivalentes al Micho, los libros de aventuras para adolescentes, etc., es decir, textos creados exprofeso para ser leídos por personas que no tienen el latín como lengua nativa, siempre acordes a nuestro nivel de conocimiento y fluidez.
Afortunadamente, son muchos los textos de este tipo que existen ya. A continuación, los iré listando en el orden en que los recomiendo, indicando sus características más importantes y qué hacer y qué esperar de ellos.
👉 En todo momento esta guía de lectura es una guía de —ejem— lectura: aunque lógicamente todo texto puede analizarse y traducirse, lo que propongo aquí no es eso, sino realmente trabajar la lectura a simple vista. Esto no se contradice con que uno siga el método gramática-traducción del curso de latín desde cero, pues ambas prácticas (el análisis-traducción y la lectura a simple vista) son complementarias y deberían trabajarse simultáneamente.
Obras para practicar la lectura en latín:
- Lingua Latina per se illustrata, de Ørberg
- Via Latina: De lingua et vita Romanorum, de Aguilar y Tárrega
- Ora maritima, de Sonnenschein
- Julia, de Reed
- Fabulae Syrae, de Miraglia
- Obras de Lhomond
- Más universo Ørberg
- Fabulae faciles, de Ritchie
- Fabulae ab urbe condita, de Steadman (Sanford y Scott)
- The Story of the Kings of Rome, de Edwards
Lingua Latina per se illustrata, de Ørberg
Si tuviera que elegir un único libro, lógica y forzosamente tendría que ser el Familia Romana (el primer volumen de la serie Lingua Latina per se illustrata o LLPSI como suele conocerse). Empieza absolutamente desde cero y llega, muy gradualmente, a un nivel intermedio como mínimo.
Empiézalo tan pronto como te sea posible al iniciarte en el aprendizaje del latín. Ve leyendo pausada, concienzuda y detenidamente los textos, fijándote en las notas y dibujos al margen, haz las actividades, etc.
Es un libro que con una inversión económica muy pequeña da muchísimo contenido. Al principio los textos son algo tediosos por la repetición excesiva de estructuras y lo simplón de la narración, pero poco a poco el contenido va haciéndose más variado e interesante.
Via Latina: De lingua et vita Romanorum, de Aguilar y Tárrega
Publicado en 2022 y además de creación española, Via Latina es el único clon de Ørberg de los —pocos— que he visto que realmente le hace sombra.
El planteamiento es igual, y, sin fijarse mucho, una página de Via Latina podría confundirse fácilmente con una de Lingua Latina, pues la estructura es prácticamente idéntica. Empieza también desde cero y va añadiendo gradualmente vocabulario, gramática, etc. (En esto es igual que Lingua Latina, por lo que no daré más detalles).
En mi opinión, Via Latina es superior a Lingua Latina en al menos dos aspectos: los textos son más interesantes (comienza con la historia de Rómulo y Remo y va avanzando por la historia de Roma hasta los hermanos Graco) y las actividades son razonablemente menos mecánicas.
Por contra, cubre menos materia que Familia Romana; es de suponer que se publicará una continuación, aunque no me consta nada al respecto por el momento.
Nota sobre Lingua Latina y Via Latina. Estrictamente hablando, no se trata de materiales de lectura, sino de libros de texto completos con sus propias actividades, etc. Aun así, incluyen una gran cantidad de texto de dificultad ascendente, por lo que para mí cumplen perfectamente con la función de material de lectura; si además tenemos en cuenta su precio, bastante reducido para todo lo que ofrecen, son una ganga. Si puedes, mi recomendación es adquirir los dos (Familia Romana y Via Latina) e ir haciéndolos de forma más o menos simultánea; si no puedes permitirte los dos, Familia Romana abarca más, por lo que iría antes a por él.
Nota sobre las novellae. Existen las novellae, es decir, novelitas en latín, que son precisamente eso: novelas cortitas, normalmente para principiantes, compuestas expresamente como material de lectura y a menudo con cierta imitación de Ørberg (notas y vocabulario en los márgenes o al pie, normalmente en inglés, no en latín). El problema principal que les veo es que la mayoría de ellas son muy cortas, incluyen muy poco vocabulario y gramática y, para lo que ofrecen, son demasiado caras (7-10 € cada una) si las comparamos con Lingua Latina y Via Latina. Quizá puedan ser interesantes para tenerlas en bibliotecas de centros educativos y que los estudiantes puedan acceder gratuitamente a ellas.
Ora maritima, de Sonnenschein
Empieza prácticamente desde cero y va progresando muy poco a poco. Llega solo hasta la tercera declinación, pero usa todos los tiempos de indicativo activo y el imperativo de presente.
Está ambientado en la Inglaterra de principios del siglo XX, pero hacia la mitad va virando hacia la antigua Britania, su descripción y la incursión de Julio César en la isla.
El principio y alguna parte es un poco… de otro siglo… pero se le perdona porque no tarda en ponerse bastante interesante, especialmente la parte de la antigua Britania.
El libro es de dominio público y puede consultarse gratis; además, lo trabajamos en AcademiaLatin.com con su lectura y comentario.
Tiene una continuación, Pro patria, que literalmente continúa donde Ora maritima lo deja.
Julia, de Reed
También empieza prácticamente de cero y va progresando poco a poco. Sin embargo, avanza e introduce más contenidos gramaticales bastante más rápido que la mayoría de libros que empiezan desde cero.
En mi opinión, Julia destaca por su amenísima narración y por la elección de historias, contadas de forma bastante encantadora.
El libro es de dominio público y puede consultarse gratis; además, lo trabajamos en AcademiaLatin.com, incluyendo su análisis, traducción y comentario.
Aquí damos un salto considerable. Para empezar con estos libros deberíamos conocer ya los fundamentos de la gramática latina y poder leer con razonable fluidez Familia Romana y Via Latina.
Fabulae Syrae, de Miraglia
Creado como complemento de LLPSI que puede comenzarse a partir de su capítulo XXVI, es un libro propiamente de lectura (sin actividades) con toda la estructura de los textos LLPSI.
Se trata de relatos mitológicos, por tanto bastante amenos, más o menos adaptados de las Metamorfosis de Ovidio (y me imagino que alguna fuente más).
Dado su precio y la gran cantidad de texto que incluye, sería mi primera recomendación una vez estemos avanzados en Familia Romana.
Obras de Lhomond
El francés Lhomond escribió en el siglo XVIII dos fantásticas obras en un latín bastante accesible. Según nuestras preferencias por el tema de una u otra, podemos empezar por cualquiera, aunque el Epitome historiae sacrae, un resumen del Antiguo Testamento, es bastante más fácil. La otra obra es la más popular: De viris illustribus urbis Romae a Romulo ad Augustum, una historia-biografía de Roma y sus personajes desde Rómulo hasta Augusto; esta debería hacerse, mejor, tras Fabulae ab urbe condita.
Además, en el siglo XXI el italiano Roberto Carfagni ha editado-orberguizado el Epitome, disponible en este formato mucho más accesible, que además incluye actividades, a un precio baratísimo para todo lo que incluye.
Requieren un dominio del latín decente para poder comenzarlas. El nivel de dificultad es más o menos constante dentro de cada una de las obras. La narración es más próxima a la mera historiografía que al relato, es decir, más o menos plana.
Los textos de Lhomond en sí son de dominio público y pueden consultarse gratis. Trabajamos el Epitome en AcademiaLatin.com, incluyendo su análisis, traducción y comentario.
Más universo Ørberg
Ørberg (y compañía de seguidores) publicaron bastantes más adaptaciones orberguizadas de obras clásicas, etc. Ordeno por dificultad las que yo he usado:
- Colloquia personarum. Ampliación (= más práctica) sobre las historias y los contenidos del primer volumen. No está de más, pero puede ser redundante.
- Sermones Romani. Especie de antología de diversos autores de dificultad bastante variable.
- Commentarii de bello Gallico. Los libros I, IV y V (con algunos recortes y adaptaciones) de la famosa obra de César. Especialmente útil para dar el primer salto a textos de verdad.
- Catilina. Remezcla de la Conjuración de Salustio y las Catilinarias de Cicerón.
- Aeneis. Los libros I y IV de la Eneida de Virgilio adaptados, orberguizados, etc.
- Ars amatoria. Más o menos intacta, con algunas modificaciones.
Fabulae faciles, de Ritchie
Comienza siendo más fácil que De viris illustribus, pero especialmente en la parte de Jasón y los argonautas la dificultad ya aumenta bastante y diría que supera la de Lhomond.
En 100 capítulos resume la historia de los héroes griegos Perseo, Hércules, Jasón (y los argonautas) y Ulises. La narración es mucho más amena que en Lhomond.
Existe la versión editada por Steadman, que recomiendo adquirir por su reducido precio. Además del texto con macrones (vocales largas), incluye un cómodo vocabulario y notas en cada página, que marca una gran diferencia a la hora de leer sin perder (demasiado) el hilo por desconocer el vocabulario.
El texto en sí es de dominio público y puede consultarse gratis; además, lo trabajamos en AcademiaLatin.com con su lectura y comentario.
Fabulae ab urbe condita, de Steadman (Sanford y Scott)
El planteamiento es similar al De viris illustribus. Incluye un resumen-adaptación de los dos primeros libros de Tito Livio y de algunas biografías realizadas por Lhomond. Probablemente sea mejor empezar por aquí y luego pasar al De viris illustribus.
La obra original, de 1922, es A Junior Latin Reader, de Sanford y Scott, que Steadman ha adaptado en el siglo XXI, tomando solo los textos, en Fabulae ab urbe condita.
Los textos en sí son de dominio público y pueden consultarse gratis. Aun así, merece la pena la reducida inversión de la edición de Steadman.
The Story of the Kings of Rome, de Edwards
Es un resumen-adaptación del primer libro de Tito Livio. Tiene más de resumen que de adaptación, por lo que la dificultad se acerca cada vez más a la obra original.
Además de por su mayor dificultad, es preferible hacer este libro después del Fabulae ab urbe condita, ya que así conoceremos de antemano el trasfondo de todo lo que se cuenta, lo que nos facilitará la comprensión.
El libro es de dominio público y puede consultarse gratis; además, lo trabajamos en AcademiaLatin.com con su lectura y comentario.
⚠️ Antes de terminar…
Nota 1. Esto es una simple guía de lectura: no es la guía definitiva para leer cualquier texto latino desde cero, ni lo que digo aquí es lo único que necesitas para alcanzar la fluidez. Practicar la lectura es imprescindible, sí, pero no es lo único: también hay que estudiar la propia lengua latina.
Nota 2. La lista no es completa ni pretende ser exhaustiva, pero sí que la voy completando según voy encontrando, probando y experimentando con más obras para practicar la lectura en latín. Por supuesto, aquí cabría añadir bastantes de los materiales complementarios del mundo Ørberg, pero los reseñados son los que me parecen más apropiados para llegar a un nivel avanzadito; otros materiales son para cuando ya se tiene el nivel avanzadito.